sábado, 7 de abril de 2012

EL MICROONDAS Y SU HISTORIA

Desde la invención del fuego, hace tal vez un millón de años, hasta la del horno microondas, en 1952, el procedimiento para la cocción de los alimentos había sido el mismo: la fuente de calor provenía de una materia en combustión.

Sin embargo, el microondas no requiere elemento térmico alguno. Una energía electromagnética pura agita las moléculas de agua contenidas en todo alimento, provocando en ellas calor suficiente para que se cuezan en sí mismas. El elemento determinante de tan sorprendente proceso es un tubo electrónico capaz de producir energía de microondas, es decir: de ondas muy pequeñas. Es el magnetrón. Este elemento había sido descubierto en 1941 por el inglés John Randall y su amigo H.A. Boot. Estos dos científicos no se habían propuesto inventar un medio de cocción de alimentos de manera rápida, sino que buscaban la manera de hacer posible el radar, método de detección de la aviación alemana en la Segunda Guerra Mundial. Para aquel fin, el magnetrón era esencial.

El empleo del microondas con fines culinarios fue accidental. Un día en el que Percy Spencer manipulaba el magnetrón, se llevó la mano al bolsillo, donde guardaba una tableta de chocolate, y comprobó que se había derretido. No supo al principio a qué achacarlo, pero su curiosidad le llevó a probar con otras cosas, ya que sabía que las microondas del magnetrón generaban un calor muy intenso, aunque él no lo había notado. Introdujo una bolsa de granos de maíz en el mismo bolsillo, que a los pocos minutos rebosaba de palomitas. Intrigado, a la mañana siguiente, el ingeniero Spencer, de la firma Raytheon Company, llevó al laboratorio una docena de huevos. Agujereó uno de ellos y lo trató con su magnetrón; un curioso se acercó a ver lo que Spencer hacía, y nadie pudo evitar que se le salpicara de huevo la cara, ya que el huevo se había cocido de dentro afuera, y la presión había hecho estallar la cáscara. El uso del microondas acaba de inventarse. ¿Por qué no aplicarlo a otros

alimentos? Así se hizo. La Raytheon Company no tardó en anunciar su famoso Radar-Range, pero con escasa repercusión debido a lo enorme de su tamaño, casi tan grande como un refrigerador, con el inconveniente adicional de que aun siendo tan descomunal, su espacio útil era muy escaso. Se vendieron algunos aparatos en restaurantes y hoteles, pero el gran público no se sintió motivado hasta 1952, fecha en la que la Tappan Company lanzó su modelo de dos niveles de cocción con mando regulador de tiempo. El artefacto en cuestión podía adquirirse por mil doscientos noventa y cinco dólares, un precio muy elevado, que sin embargo no fue un obstáculo para su comercialización, dadas las espectativas y aplicaciones de tan sorprendente máquina. Fue un éxito. Uno de los primeros modelos de microondas, el llamado Hotpoint, o "punto caliente", fue centro de atracción de ferias y exposiciones durante más de diez años. Su triunfo estaba asegurado.
¿Quieres un sitio de dónde bajar buena música internacional de todos los tiempos, con enlaces que funcionen y no caduquen y con novedades semanales?

No hay comentarios:

Publicar un comentario