DÓNDE NOS GUSTA ESTÁR

Ayer fue un día de esos que se quedan para siempre en el recuerdo y en el corazón por varios motivos.
Tras mi marcha del CD MÓSTOLES como masajista deportivo, y tras varias charlas con uno de los entrenadores que permanece en la disciplina del club, se me brindó la posibilidad de seguir ejerciendo la profesión por la que luché y estudié y seguir de algún modo, vinculado con los crios que tanto quiero.
Tras unos días de toma de contacto con ellos, ayer sábado, se unieron muchos vínculos.
Mi jornada comenzó a las 6:40 hora en la que me levanté emocionado por lo que se avecinaba en el día.
Marché con mi primo que trabajaba en Móstoles, lugar dónde los grandes acontecimientos de mi vida han transcurrido, dispuesto a trabajar como masajista deportivo en el primer partido de liga que disputaba el INFANTIL C del CLUB DEPORTIVO MÓSTOLES contra un equipo también de la ciudad de reciente creación el TORREMAR.
Son tantas cosas las que tendría que contar del partido desde que entré en el vestuario mientras el entrenador GERMÁN daba las fichas federativas al árbitro, y yo ordené salir a calentar y obedecieron como si fuese el mayor mandatario de ellos, hasta el "corto" (esto lo digo irónicamente) resultado de 6-8 a favor de los niños que ya de alguna forma, dirijo.
Se acabó el partido y todo eran felicitaciónes entre ellos. Yo me quedé sorprendido, cuando uno o dos de los jugadores que vestían de rojo es decir los míos, me dieron la mano también felicitándome por el resultado. !eso si es un equipo!
La mañana, transcurría tranquilamente y se aproximaba la hora de comer en Fuenlabrada en el restaurante "el arriero" dónde a parte de comer y algunos reir de la caída del entrenador, echamos unas risas con los comentarios de los niños, y con algunos miembros que no les gustaba la ensalada, y ante las burlas de bomitar, o los cánticos de "que bomite, que bomite" llegó la hora de partir rumbo hacia la radio. Lugar de destino y con el fin del día.
COPE era el destino elejido y el programa TIEMPO DE JUEGO, los que nos tendrían que aguantar.
En atocha, nos esperaba la otra parte de la expedición mostoleña y tras un paseito hasta la radio, el imponente edificio nos aguardaba en silencio.
Cabe destacar aunque muy de pasada, el incidente vivido en el metro con un ser extraño de definir que andubo probocandome para que borrase una foto en la que él creía que salía. Dicha foto es esta:

Esta foto como digo, fue echa en el bagón del metro pero podría adjuntar muchas más de este momento. Me las guardo por ahora...
Tras pasar por el detector de metales y ponernos la pertinente pegatina que nos autorizaba para visitar el estudio principal dónde se emitía TIEMPO DE JUEGO, y tras una pequeña riña a un jugador por parte del entrenador, yo ejercí como de policía bueno, y le mandé que pasara.
Bajábamos por las escaleras en un silencio nervioso y al pasar al estudio, fué algo... Paco gonzález ya estaba preparado y Pepe Domingo, sentado dos asientos a la izquiérda según nuestra posición, se dió la vuelta para ver nuestra entrada. No es normal que entren casi 25 personas de golpe y vestidos todos igual.

El programa empezó y el espectáculo de la radio, se vivió en todo su explendor. La cara de atención de los niños lo decían todo.

La pecera, los micros, la cantidad de gente que estaba allí, las televisiónes dónde veían los partidos... Todo fue una aventura que a los niños con su foto firmada de Paco González y Pepe Domingo, se fueron muy contentos y con ganas de repetir.
Sé que me he dejado muchos detalles y sé que habrá más ocasiones para contaros todo lo que allí se vivió. Como destacado, nuestro futuro periodísta deportivo, que "algún" pajarito contó a Pepe Domingo los planes de Cerezo.

Y para finalizar, una foto de grupo, una foto que hoy todos querrán.
Agradecer especialmente la simpatía de Pepe Domingo con los niños, las locuras de Wily, la atención de Hebia y en especial a Ana García por ser la que nos dió pié a poder entrar a los estudios. Gran culpa de que estubiésemos allí, según Germán, la tengo yo pero yo no ice nada. La culpa es de los niños que quisieron pasar un día en compáñía de la radio.