sábado, 27 de marzo de 2010

DÍA DEL TEATRO


Hoy 27 de marzo escuché en la radio que es el día del teatro y tenía previsto publicar esto en días venideros pero adelanté la publicación por este motivo.

« "Así que pasen cinco años" de Manuel Monteagudo en la sala La Fundición de
Sevilla

Llega el teatro de los niños ciegos con "Los libros olvidados" de la
compañía de niños ciegos Menudo Trajín
El Correo de Andalucia / César Rufino / 11-03-2010

A Belén Pérez le ha costado lo suyo escribir Los libros olvidados para su
compañía. Y no ya porque los más chicos tengan siete años, ni porque 12 de
sus 21 miembros sean ciegos, que también, sino porque dónde se ha visto que
los actores exijan a su dramaturga de cabecera que los protagonistas sean un
romano, un hada, un indio y una azafata de avión, como es el caso. "Y
encima, que tenga sentido", protestaba ayer (protestar no es el verbo) la
citada directora. Por eso, cuando mañana a mediodía se alce el telón del
Centro Cultural Cajasol, el público no sólo verá a una compañía infantil
llamada Menudo Trajín; ni contemplará únicamente una deliciosa comedia que
homenajea a los clásicos juveniles de toda la vida. Además, presenciará la
escenificación de un milagro de voluntad, de empeño y de esperanza. Ya lo
decía Beethoven, que no era ciego pero sí sordo: ¡Actúa en vez de suplicar!
¡Sacrifícate sin esperanza de gloria ni recompensa! Si quieres conocer los
milagros, hazlos tú antes. Sólo así podrá cumplirse tu peculiar destino. Y
eso es lo que, obedientemente, están haciendo estos gaditanos.

"Me encanta que los niños lean Harry Potter, es maravilloso", comentaba
Belén, "pero también deberían leer La isla del tesoro, El último mohicano y
Los tres mosqueteros. Darían valor a otras cosas: al compañerismo, a la
amistad, a saber apreciar la relación con las personas mayores". Todo eso y
más pretende aglutinar con Los libros olvidados. "¿Qué pasa con esos libros
que ningún niño lee? Desaparecen", explica la autora y directora. "Sí. Y hay
un personaje siniestro, malvado, el Señor de la Oscuridad, que está empeñado
en que esos libros se olviden para siempre, porque así los niños se volverán
más ignorantes y él dominará el mundo. Pero hay también un Señor de la Luz,
que manda a un guerrero para evitarlo, con la única condición de que no
puede usar la violencia; sólo la astucia."

El héroe se llama Uncas, como el de El último mohicano. Tiene gafas: es
deficiente visual. "Guillermo es muy profesional", dice Belén Pérez del
actor. "Se lo toma muy en serio." Otro estilo diferente, ni mejor ni peor,
es el de Francisco, "arte natural gadita puro", lo define su jefa. Francisco
es el romano de la foto; un romano que, como han robado los libros, no sabe
que es un personaje de Qvo vadis?, versión andaluza. Luego está Aina, una
niña a la que el teatro está puliendo su corteza de timidez hasta dejársela,
a día de hoy, en una especie de aura resplandeciente. "Tenía problemas de
movilidad. Ahora baila la danza del vientre." Lo cual le viene de perlas
porque hace de Scherezade. Una Scherezade fashion, hay que decirlo, cuya
lista de prioridades parece encabezada por meterse en un yacuzzi.

Hay un personaje al que Scherezade llama Popeye, porque es marino (y porque,
como ya se ha dicho, los niños de esta historia tienen la misma idea de
literatura universal que un congrio adolescente). Tres mil años de poesía
homérica para esto: en realidad es Ulises. Lo interpreta Alejandro.
"Alejandro es el pasota del grupo. Bueno, pasota no; que se toma las cosas
de otro modo." Pasota: véase Gandhi.

El reparto no sería el mismo sin Ismael, ciego total que interpreta a un
gran mago con tan marcado acento de Conil que todavía no ha terminado de
abrir la boca y ya está todo el mundo muerto de risa. Qué decir del Hada
Pizpireta, si su grito de guerra preferido es Ese Cádiz, oé. Pues eso, que
su salero compensa con creces su deficiencia visual y su parálisis cerebral.
Todo esto y mucho más, señoras y señores, es el teatro. El teatro de Menudo
Trajín. En otoño estrenarán esta obra en el Falla, donde ya levantaron al
público de los asientos con ocasión de milagros anteriores. Es su trabajo.

De utilidad:

Qué: La compañía de niños ciegos Menudo Trajín estrena en Sevilla la obra
Los libros olvidados.
Quienes: Son 21 actores de entre 7 y 17 años. A partir de los 18, ingresan
en la compañía Orozú Teatro.
Cuándo: Mañana, a las 12.00 (harán una segunda función para niños ciegos por
la tarde).
Dónde: La representación matinal será en el Centro Cultural de la Fundación
Cajasol (C/ Laraña, 4).
Cuánto: Entrada gratuita.

No hay comentarios:

Publicar un comentario